Quién publica un libro demuestra que es docto.

 

DOCTORADO PROFESIONAL o doctorado de tercer ciclo

El doctorado profesional, o doctorado de tercer ciclo, avala una alta pericia en una disciplina, sin pretensión necesaria a la investigación científica. En efecto uno puede ser docto, ou sabio, sin tener la vocación de un investigador en ciencias fundamentales. No obstante hay que primero haber demostrado su pericia (generalmente escribiendo un libro) y segundo que ésta haya sido reconocida (en el caso por un gran editor).

Se pueden distinguir esencialmente dos perfiles tipos de doctores de tercer ciclo:

  • los ejecutivos especialistas y consultores que sintetizaron sus conocimientos o su experiencia en un libro aceptado por un gran editor (no auto-editado) y a menudo prologado por una autoridad intelectual,

  • los docentes e investigadores que recopilaron el estado del arte en su disciplina (por ejemplo para una maestría o un máster de investigación) pero no produjeron todavía una teoría original que les permita presentar una tesis de investigación.

Así, al restaurar el doctorado de tercer ciclo la Université Multiculturelle Internationale pretende contribuir a:

  • remotivar los altos perfiles que no pueden ofrecerse un súper-doctorado a la francesa para obtener el título suprema,

  • detener la fuga de doctorandos de mediano alcance hacia el sistema anglo-sajón,

  • limitar la producción de construcciones elucubratorias artificiales impuestas que arruinan la imágen general de los doctores,

 

  • restaurar la paridad de diplomas entre peritos de habla latina y anglófonos notablemente,

  • corregir la sub-estimación de los sabios latinos frente a "doctores" de 23 años asiáticos y americanos.

Porque doscientas páginas de texto sintético, concreto y práctico, como un manual de consultor que debe ser bastante útil para venderse bien, no exige necesariamente menos investigaciones que setencientos páginas de exposición minuciosa sobre el interés de una cuestión teórica, los procesos elegidos para abordarla, el desarollo y la explotación de la investigación correspondiente y luego la presentación de la respuesta a dicha cuestión en un volúmen limitado únicamente por la capacidad de almacenaje de la biblioteca polvorienta en donde todo aquello acabará, aunque se trate en un caso de investigación aplicada y en el otro de investigación fundamental. Y el comité de lectura de un gran editor no comprometerá más su imágen de serio sobre un borrador tambaleante e invendible, que lo haría un director de tesis universitaria sobre una pseudo-teoría indefendible.

 

Doctor,
Si no lo es todavía, es para pronto. Todo libro publicado Todo libro publicado (menos artístico u auto-editado) vale un doctorado de tercer ciclo. Si apunta a un diploma de universidad que le permita inscribir el título de Dr en su tarjeta o en contratapa, más que un diploma estatal para la docencia e investigación universitaria, puede tener su doctorado en manos el mes que viene, sin viajar.

 

En Francia se diferencia por una parte el doctorado de investigación, (antiguamente "doctorado de estado"), necesitando al menos ocho años de estudios y sobretodo un aporte personal al progreso de la ciencia en la disciplina considerada (generalmente por la presentación de una tesis original), y por otra parte el doctorado de ejercicio, diploma de pericia profesional necesitando alrededor de seis años de estudios especializados (medicina, farmacia, odontología) seguidas según el caso de algunos años de pasantía de aplicación (internado), como para el título de contador público. Así las disciplinas médicas son las últimas que conservaron, bajo la forma del doctorado de ejercicio, el antiguo doctorado de especialidad o doctorado de tercer ciclo, otrora preparado en un año después de un diploma de estudios avanzados, y a un nivel de exigencia superior al antiguo doctorado de universidad pero inferior al doctorado de estado que exigía una contribución original al saber de la humanidad.

En el mundo el título de doctor fue primero otorgado por la Iglesia a los sabios cuya solidez de juicio les autorizaba a enseñar la doctrina. Así el doctor es un sabio que hace autoridad (un autor y no un simple repetidor) y que enseña. Si los términos latinos doctor y doctus, de "doceo" (enseño), evocan la conducción, el término griego didaktor apunta precisamente al docente. Numerosos países de sistema educativo pragmático (Estados Unidos por ejemplo) llaman doctores tanto a los peritos capaces de enseñar como a los investigadores teóricos, a veces distinguiendo dos orientaciones (o aún dos niveles) de doctorados, un doctorado profesional y un doctorado de investigación. Otros sistemas (inglés o australiano por ejemplo) distinguen los doctores en ciencia aplicada de los doctores en ciencia fundamental. Por fin algunos sistemas universitarios separan, después del equivalente de un ex-segundo ciclo francés (licenciatura en cuatro o cinco años) dos vías paralelas y de misma duración, una para el título profesional de maestría o máster y la otra para el título científico de doctor, como por ejemplo en Argentina donde los títulos de Maestría y Doctorado corresponden a una misma duración de estudios (dos años después de la Licenciatura) pero a dos orientaciones diferentes, la práctica en un caso y la teoría en el otro. Por el contrario, en Italia el término de "dottore" fue utilizado para todos los egresados, del nivel "laurea" (Bachillerato + 3), "specializzazione" (Bachillerato + 5), y por supuesto "dottorato di ricerca" (Bachillerato + 8).

La Université Multiculturelle Internationale, después de haber sido la primera universidad francófona a practicar la convalidación del producto de la experiencia (Validation des Acquis de l'Expérience en francés), y luego la primera universidad francófona a otorgar un suplemento europeo al diploma personalizado para cada perfil individual, retoma a partir de 2012 el doctorado profesional, otorgado según las modalidades definidas en 1954.